Este año ha sido devastador para el Santos de Brasil, marcado por uno de los momentos más oscuros en sus 111 años de historia. Después de sufrir una derrota por 1-2 ante Fortaleza en el cierre de la temporada, el Peixe se encuentra en una posición comprometedora, ubicado entre los cuatro equipos que enfrentan el riesgo de descender de categoría.
A lo largo de su destacada trayectoria, el club ha cosechado grandes éxitos, siendo tres veces campeón de la Copa Libertadores en 1962, 1963 y 2011, además de alcanzar la final en 2003 y 2020. Asimismo, se ha consagrado en la Copa Intercontinental en 1962 y 1963, y ha acumulado un impresionante palmarés con nueve títulos nacionales y 36 campeonatos estaduales. A pesar de estos triunfos, el Santos enfrenta ahora una situación crítica que pone en peligro su estatus en el fútbol de élite.
Lamentablemente, casi un año después de la trágica pérdida de Pelé, una de las leyendas más destacadas del deporte, la campaña de Santos en esta temporada ha sido decepcionante. El equipo culminó en la posición 17, acumulando 43 puntos con un registro de 11 victorias, 10 empates y 17 derrotas.
Esta situación marca un quiebre significativo para el Santos, ya que ahora se aleja de un exclusivo grupo de clubes que nunca habían experimentado la segunda división. En cambio, se une al grupo de los grandes equipos que han sufrido el doloroso descenso, donde ahora solo Flamengo y Sao Paulo permanecen en la élite sin haber enfrentado esa situación. El Santos, una institución con un legado glorioso, se ve afectado por este revés, destacando la complejidad y la imprevisibilidad en el mundo del fútbol.
La nueva directiva del club está decidida a dejar atrás la grave crisis deportiva y económica que ha afectado al Santos en los últimos meses. Con el objetivo de afrontar la Serie B y revertir la situación, se han anunciado medidas drásticas.
Tras la elección del abogado y administrador de empresas Marcelo Teixeira como el nuevo presidente del club, se ha tomado una decisión significativa: el Santos, bajo su liderazgo, optará por no utilizar la icónica camiseta número 10 que en su momento vistió Pelé, el máximo ídolo del equipo, mientras participan en el ascenso brasileño.
El presidente del club, Marcelo Teixeira, ha compartido que, además de retirar la camiseta número 10 en honor a Pelé, también se tomará la decisión de retirar la camiseta número 11 de Neymar. Esta determinación surge después de recibir una llamada del propio Neymar tras el descenso del Santos.
“Neymar solicitó que se reservara la camiseta número 11 hasta su regreso al club. Estamos optimistas sobre su posible regreso al Santos. Será un honor tener de nuevo al talentoso jugador que contribuimos a formar. La camiseta número 11 permanecerá fuera de circulación hasta su vuelta. La comunidad está ansiosa por su regreso, y esperamos que, con su ayuda, podamos regresar a la Primera División y disfrutar nuevamente de la presencia de Neymar en nuestro equipo”.
Con la determinación del recién nombrado presidente del Santos, Yeferson Soteldo, de nacionalidad venezolana, se convierte en el último futbolista en lucir la camiseta número 10, al menos hasta que el equipo logre ascender. Aunque el desempeño del centrocampista fue destacado y se destacó como uno de los aspectos positivos del equipo, lamentablemente, no fue suficiente para asegurar la permanencia en la categoría.