Palmeiras logró una victoria crucial al imponerse 1-0 sobre Fluminense en la jornada 37 del Brasileirao, colocándose en una posición privilegiada para coronarse campeón del torneo. El equipo paulista lidera la tabla con 69 puntos, tres más que sus competidores más cercanos, Atlético Mineiro y Flamengo.
Con este triunfo, Palmeiras solo necesita asegurar un empate en la última fecha ante Cruzeiro para asegurar el título brasileño. Flamengo mantiene viva la esperanza al vencer 2-1 al Cuiabá, manteniéndose en la contienda por el campeonato.
El equipo bajo la dirección de Abel Ferreira demostró un control total del partido desde el inicio, a pesar de enfrentarse a un Fluminense resistente que exhibió en varias ocasiones una defensa sólida.
El estratega de Fluminense y seleccionador interino de Brasil, Fernando Diniz, optó por preservar a jugadores titulares como Marcelo y Germán Cano, con la vista puesta en el Mundial de Clubes de la FIFA que se llevará a cabo este mes.
Así, todas las miradas se dirigieron hacia Breno Lopes, la destacada figura de la noche. El delantero anotó el primer gol a los 16 minutos, aprovechando una asistencia magistral de Endrick, aunque esta acción fue anulada por el VAR debido a una mano del delantero de 17 años.
No obstante, la persistencia de Breno dio sus frutos. Diez minutos después, en medio de un contraataque, logró abrir el marcador y consolidar su destacada actuación en el encuentro.
Mostrando un hambre de gol insaciable, Breno Lopes no se conformó con su primera anotación. Casi al final del primer tiempo, volvió a marcar, pero lamentablemente, la jugada fue anulada debido a que el balón salió fuera de la cancha. A pesar de este contratiempo, su destacada actuación continuó dejando una marca en el partido.
En la segunda mitad, las cosas se simplificaron para el equipo paulista con la expulsión de Justen, sancionado por el árbitro debido a una falta contra el paraguayo Joaquín Piquerez, quien posteriormente abandonó el campo debido a molestias en la rodilla y es una incertidumbre para el partido del miércoles.
Minutos más tarde, Ferreira realizó cambios sustanciales al sustituir a Endrick y Breno, dando paso al argentino José Manuel López y a Jhon Jhon. Estos ajustes estratégicos buscaban consolidar la ventaja y asegurar el control en el desarrollo del juego.
Palmeiras está a punto de asegurar el título, que sería el segundo consecutivo y el duodécimo en su historia. Solo necesita un empate en su próximo y último partido el miércoles, cuando visite al Cruzeiro. Sin embargo, incluso en caso de una derrota, aún podría ganar el campeonato si sus competidores no logran victorias abultadas, gracias a su notable diferencia de goles. La situación deja al equipo en una posición muy sólida para celebrar otro triunfo en el Brasileirao.